Estupideces

Un día alguien me dijo que celebrar la fecha del propio nacimiento era absurdo y ridículo porque qué mérito tenía un hecho meramente biológico como nacer. Que no se pide, que no se busca, que no se logra. Nomás se llega. ¿Por qué me felicitas por haber nacido? No seas estúpida. ¿Por qué me regalas algo 30 años después de un suceso que jamás recordaré? No es más que reproducción desafortunada y sistemática, sólo sucede. No hay razón para celebrar nada. No seas estúpida. Felicita a mis padres, en todo caso, ¿yo qué?, prácticamente no estaba ahí... no seas estúpida.

Le hablé de magia y de misterio y le dije que lo que se celebraba no era el nacimiento sino la vida, el encuentro, estar aquí... (o allá, pues). Naturalmente, no lo convencí. Ni en un millón de vidas lo hubiera logrado. Pasaron unos meses más y jamás lo volví a ver.

Jódete y feliz cumpleaños. Vive, no seas estúpido.

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