Y se va...

Con lágrimas inesperadas por toda la cara y después de leer a una mujer sin la que no me concibo, repentinamente entendí el dolor. Lo vi tan claro. Y tuve una breve plática con algo adentro:

- Por supuesto, lo que me está doliendo tanto es soltar.
- ¿Pero soltar qué? ¿todavía... lo que nunca fue?
- No, en eso ya me terminé de retorcer, de verdad.
- ¿Entonces?
- Me duele todo lo que nunca será.
- Ah.

Duele. Mucho. Soltar la esperanza. El futuro difuso. La culpa. La ilusión. El yo sí, tú no. El darse cuenta. Muchos años más de pan con lo mismo. La impotencia. El letargo. La responsabilidad.

Una parte de mí se está muriendo y tiene que doler. Pero es mágico que sea justo la parte que se aferraba. Justo la parte que me gritaba que te estaba traicionando. Si se muere, se sueltan las cargas y yo me libero. Que descanse en paz, entonces.

Y se va... se va... se fue.

3 comentarios:

K dijo...

y bueno, nimodo que no te despidieras de ella? Te quiero, calzonuda!

letraaletrahaydetodo dijo...

Ah como me identifico contigo.

Como va!!

letraaletrahaydetodo dijo...

long live to the queen!!